En esta entrada os comenté como había ido evolucionando el marco de trabajo con el que mentorizo empresas, EDV©. La verdad es que, más allá de mi obsesión casi compulsiva a entender mejor cada metodología y herramienta que se precie, la única motivación es encontrar sentido a lo que verdaderamente es útil cuando lanzas un producto o servicio al mercado. La metodología y sus correspondientes herramientas no sirven para nada. Bueno, en realidad no debería ser tan dramático. Sí que sirven, pero no deberían ser la justificación de la acción. No deberíamos centrarnos en cómo usarlas, en si lo estamos haciendo conforme a su autor, a su libro o publicaciones. Y, personalmente, creo que en ello empleamos un 70% del tiempo.
Cada vez estoy más convencido que lo importante es poder tener preguntas y luego poder responderlas. Aunque parezca obvio, no lo es. Lo explico. A menudo, no sabemos qué preguntas son las más importantes o prioritarias, según el momento de madurez de la idea (o grado de conocimiento de la misma). Y tampoco reparamos en cómo formularlas correctamente. En nuestro argot sería como no saber definir bien una hipótesis.
Pero, aunque formulemos bien las preguntas (hipótesis), resulta que, frecuentemente, no diseñamos ni ejecutamos bien la búsqueda de las respuestas, los experimentos.
Por eso, cualquier marco de trabajo (framework) que se precie debe guiar tanto en la formulación de hipótesis, como en el diseño y ejecución de los experimentos. El objetivo, como siempre digo,
es poder abrazar la incertidumbre propia que surge de «surfear» los cambios para convertirlos en oportunidades, sin que nos duela demasiado
Y creo que ahora mismo, en este mismo momento, estoy contento y totalmente alineado con el nuevo marco de trabajo en el que he convertido EDV©. Porque creo que recoge las seis preguntas más relevantes, porque las secuencia en orden a una jerarquía y porque ofrece herramientas en cada una de ellas para poder responderlas.
Aunque pueda ser tachado de caer continuamente en la «canvitis», he creado un lienzo para poder recoger todo el proceso y disponer de una herramienta visual. Y cuando digo «recoger» es porque pienso que cada pregunta tiene muchísima profundidad como para poder resolverlo con unos cuantos post its. Por lo que el business model EDV© es el punto final de un proceso de experimentación, de ir validando cada una de las preguntas que tiene el framework y en el orden y secuencia establecidos. Para ayudar en ese proceso de experimentación he dispuesto herramientas que, en este preciso momento, considero que pueden ser útiles, pero puede que mañana no lo sean, sencillamente porque no ayuden mejor que otras a responder (diseñar y ejecutar experimentos) a las preguntas.
Te dejo por aquí un enlace a la plantilla para que te la descargues en PDF. Espero que te resulte de utilidad. Te invito a comentar y debatir.
