De acuerdo a una serie de informes elaborado por Accenture, la innovación debe considerarse como máxima prioridad para las empresas con objeto de crecer, sobre todo tras la crisis económica.
Dichos estudios se han realizado entre más de seiscientos directivos de Estados Unidos y el Reino Unido y confirman que casi la mitad de ellos (el 48 por ciento) ha aumentado su inversión en innovación durante los últimos seis meses; y que un 33 por ciento mantiene estable la inversión permanece estable. Junto a estos datos, se extrae que nueve de cada diez encuestados (89 por ciento) creen que la innovación es igual o más de importante que la reducción de costes para crecer en el futuro.
¿Podemos afirmar que nuestro entorno es ese?, evidentemente no, pero ¿qué nos falta para llegar a considerar de verdad a la innovación como una inversión?.